Nuestro columnista varón confiesa cómo viven los hombres las distintas fases de un noviazgo. Ya sea que hace poco que se conocen o que lleven juntos algunos años, descubrí lo que pasa por la cabeza de tu amor y usá eso para mantener viva la magia.

Te puede parecer que ese muchacho que está a tu lado es siempre el mismo, pero no, estás equivocada: según cada etapa de la relación, él irá cambiando (mucho). Y no lo digo solo porque le crezca la panza: Los hombres atravesamos distintos estados emocionales de acuerdo al tiempo que llevamos en pareja. Claro, como no solemos ser muy expresivos en esa materia, es posible que ni lo hayas notado. Por eso, te quiero contar qué le puede pasar a tu chico cuando recién se conocen, a los dos años y a los cinco de estar juntos. Consideralo mi modesto aporte para que hombres y mujeres nos entendamos mejor.

Al principio, todo es perfecto

Cuando recién empiezan a salir, él está más feliz que Riquelme. Es el momento en el que cada uno vive en su casa, tiene su espacio propio y, a lo sumo, vos le dejás el cepillo de dientes en su baño para cuando te quedás a dormir. A tu chico le divierte la situación de elegir entre su departamento o el tuyo para pasar la noche. En general, él está entusiasmado con este nuevo estado amoroso, proyecta su futuro junto a vos y hasta piensa en la posibilidad de borrar todos los contactos femeninos de su celular. Es un período en el que todavía conserva actividades por afuera de la relación y recurre a cualquier tipo de estrategia para caerle bien a su flamante familia política.

Rutina adorada

Si llegás a cumplir dos años de noviazgo, sabé que en la cabeza de tu chico ya merodea la idea de la convivencia, aunque todavía no le reclames casamiento ni hijos. En esta etapa, él se siente feliz con la "rutina" que lograron armar juntos. Incluso, te acompaña al supermercado y se queda mirando a tu lado las góndolas con 100 productos femeninos sin intentar escaparse. La química en esta etapa es tan grande que él solo se prende en el partido de fútbol semanal con sus amigos si tu mamá, tu papá o tu hermana no cumplen años, ya que sigue interesado en caerles bien, pese a que a esta altura no tienen más temas de conversación, salvo el estado del tiempo o el descenso de River. Sabelo: tu chico te extraña y quiere que llegues lo más temprano posible de la oficina. En un acto crucial, ya borró del celular todos los números de mujeres para no generarte celos ni paranoias.

 Juntos... ¿Para siempre?

Al cumplir los cinco años, él oscila entre cierto acostumbramiento y algunos síntomas de "amnesia parcial", ya  que le cuesta acordarse de la fecha exacta de sus aniversarios. Lo bueno es que durante todo este tiempo, para evitar que le apuntes con la aspiradora, aprendió a colgar la

ropa en el placard y no en la silla o en la puerta del baño. Aplacado bajo la resignación, ya no se esmera en caerles bien a tus familiares, sino en estar el menor tiempo posible con ellos. Tampoco se preocupa si llegás un poco tarde de la oficina porque eso le deja más tiempo para ver el partido antes de que te enganches con alguna serie de Sony. Quizá, tu novio haya recibido uno que otro mensajito de una ex, pero como la borró de la agenda no sabe cuál de todas es, así que ni se gasta en responderlo. Por otro lado, pase lo que pase, se raja de tu casa para jugar el glorioso partidito

de fútbol con los amigos, así descansa de la vida hogareña. Pero ojo, más allá de todos estos cambios emocionales, tu chico sabe que si llegaron a los cinco años, bien podrían estar juntos toda la vida, o por lo menos, todo el tiempo que lo aguantes.

FOTO: EFE.