¿Qué es la sexualidad inteligente?
Una sexualidad inteligente es aquella que nos conecta con nuestro cuerpo, con nuestras emociones, con los otros e incluso puede pensarse como un camino de crecimiento interior. Una sexualidad que nos enriquece y que nos hace más felices.
Según la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner hay siete tipos de inteligencias (musical, físico-kinestésica, lógico matemática, lingüística, viso-espacial, interpersonal e intrapersonal). La inteligencia sexual atraviesa cada una de ellas, las integra y posiblemente incluya otras no descriptas.

¿Creés que a los hombres y a las mujeres les cuesta sentir placer?
A muchos hombres y mujeres les cuesta porque no se los enseñaron. La educación sexual que recibimos está atravesada por mitos y prejuicios, y en lugar de generar una sexualidad más libre, produce miedos, inseguridades y complejos. Lo primero que necesitamos para sentir placer es permitírnoslo y en  segundo lugar, relajarnos.
 
El Dr. Juan Carlos Kutnezoff dijo que tu libro alfabetiza. ¿Cuál sería el ABC del sexo?
El Dr. Kusnetzoff habla de analfabetismo sexual y yo de mal educados sexuales, pero en realidad estamos hablando de lo mismo: la falta de una buena educación sexual (digo buena porque educación sexual hay siempre). Si tengo que simplificar el ABC de la sexualidad puedo hacerlo en cuatro palabras: Información, Creatividad, Flexibilidad y Práctica.

¿Te animás a spoilearnos algún mito que quisieras derrumbar con el libro?
Mi principal objetivo con este libro fue derrumbar dos mitos. El primero es la idea de que la sexualidad es algo con lo que se viene, como si fuese una capacidad innata que algunos tienen más que otros. La realidad es que la sexualidad se aprende de principio a fin.  La segunda, es la creencia de que el deseo sexual es espontaneo.  El deseo sexual puede ser espontaneo en algún momento de la vida o en situaciones puntuales, pero si no lo trabajamos, si no nos ocupamos, eso desaparece.

¿A las mujeres nos cuesta más que a los hombres vivir el placer libremente?
Las mujeres tienen que superar el prejuicio de que si disfrutan son “rapiditas” y los hombres tienen que aprender a disfrutar con sus novias, porque para algunos todavía se disfruta con la amante y con su mujer hacen el amor, de manera monótona, rutinaria y aburrida.