1. Una cucharada tiene más azúcar que una galletita de chocolate.
Cuando un aderezo es endulzado históricamente con jarabe de maíz de alta fructosa, pasan estas cosas. Una cucharadita tiene  3,7 gramos  de azúcar. Imaginate la cantidad de azúcar que tiene tu pancho ahora.
2. Tapa el sabor de cualquier cosa que toca.
No importa si le pusiste a tus papas y no a la hamburguesa. Ambos van a tener el mismo sabor.
3. La textura es rara.
Y somos generosas. No es ni cremosa como la mayonesa ni liviana como la mostaza. Siempre tenés que agitar el frasco para que salga y te terminás manchando.
4. El olor.
¿Nunca te pasó que desupués de comer ketchup sentís que tenés ese olor en toda la cara? Es muy fuerte, se puede identificar de lejos y todos se enteran qué comiste.
5. Es muy difícil evitarlo.
Pollo frito, con ketchup al lado. Papas fritas, con ketchup a costado. Hamburguesa que ya viene con ketchup. Definitivamente, es el condimento más popular en los lugares de comida rápida.


					


















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