Tener sexo te lleva al éxtasis, libera en tu organismo sustancias que generan bienestar y te permite crear una conexión única con tu hombre. Un bonus track: impacta en tu silueta como una sesión de entrenamiento intenso. “Un encuentro íntimo implica un esfuerzo físico considerable: es una demanda que compromete a todos los músculos, incluso el cardíaco”, asegura el psiquiatra Harry Campos Cervera, de la Asociación Psicoanalítica Argentina. El personal trainer Adam Rosante, autor del libro The 30 Second Body, asegura que es posible quemar hasta 200 calorías (las que proporciona media hamburguesa con queso o medio litro de gaseosa no light) en un encuentro íntimo de 30 minutos. Claro que no vas a lograrlo si te limitás a la pose del misionero: aprendé cómo maximizar los beneficios del sexo.
LOTO RELOADED
Él se sienta con las piernas extendidas hacia adelante. Vos ubicate en su regazo y rodeá su cintura con tus piernas. Extendé tus brazos como si quisieras tocar el techo, al tiempo que movés tus caderas (arriba, abajo y en círculos). Vas a fortalecer tu región abdominal y tus piernas. Sostené los brazos en alto para que el esfuerzo sea más intenso.
DE RODILLAS
Arrodíllense, uno frente al otro. Tu hombre debe acomodar sus piernas entre las suyas y penetrarte. Ambos deben moverse al unísono. De esa manera vas a ejercitar abdomen, piernas y hombros.
COWGIRL
Una variante de la jineta: ubicate sobre la pelvis de él, sosteniendo el peso de tu cuerpo con tus piernas y tus pies. Él tiene que penetrarte y quedarse inmóvil: vos vas a ocuparte de la acción. Esta pose hará que ejercites tus abdominales bajos. Para que los músculos de tus brazos también trabajen, apoyá las palmas de tus manos a la altura de los hombros de él.
LA PLANCHA
Apoyá los antebrazos y los dedos de los pies en el piso y mantené la pose de plancha mientras, en cuclillas sobre vos, él te penetra por detrás. Vas a tonificar la cola y los brazos.






















Comentarios