¿Quién hubiera pensado que una publicidad de lotería española te dejaría bañada en lágrimas? Esta, sin lugar a dudas, lo ha logrado.
El comercial presenta a Justino, un guardia de seguridad nocturno que trabaja en una fábrica de maniquíes. Cada noche, despierta a las 10 p.m. y se presenta a trabajar en la solitaria y vacía fábrica. Este simpático personaje pasa sus horas reacomodando maniquíes y formando figuras con ellos, para divertir a los trabajadores que se presentan a la mañana siguiente en la oficina. Ellos no conocen a Justino pero él les ilumina el día con brillantes ideas, dándoles un motivo para sonreír.
Algo sorprendente pasa después. El grupo de trabajadores se inscribe para jugar en la lotería navideña y ganan. Esa noche, Justino se presenta a su puesto como todas las noches y algo maravilloso ocurre. Lo voy a dejar acá para que descubras vos mismo el increíble final. Pero te advierto, probablemente vas a necesitar un par de pañuelos.
Fuente: Cosmopolitan.com




















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