Sabés que el momento está cerca. Cada vez que están juntos es como si los envolviera un fuego (OMG!). El primer encuentro sexual con tu chico no solo te genera adrenalina, sino también expectativas y muchas inquietudes: “¿La pasaremos bien? ¿Le voy a gustar desnuda?  ¿Será debut y despedida? ¿Qué hago si no chocan los planetas?”. 

Es normal que tengas algunas dudas, pero no un tsunami de sensaciones descontroladas. Entonces, convengamos: podés perder la cabeza, pero solo por placer. Los expertos te cuentan las movidas que garantizan una noche alucinante.   

¡Entregate!

¿Nerviosa? “Lo primero que debés hacer para controlar la ansiedad es no disimularla: eso puede confundirlos a vos y a tu pareja, y complicar más la situación”, aconseja el psicólogo y sexólogo Patricio Gómez Di Leva, director de Respuesta Sexual (www.repuestasexual.com). El especialista recomienda que hables con tu chico de lo que sentís (ojo: tratá de no dramatizar”). Hacerte  la superada es una pésima idea. “Los esfuerzos por mostrarte como la Mujer Maravilla no suelen dar muy buenos resultados en esos casos”, advierte Di Leva. ¿Cómo podés frenar tu mente? “La mejor herramienta para estar relajada es confiar en vos misma y en el otro”, asegura la psicóloga y sexóloga Celia Laniado (www.sexologacelia.com).

Cuando solo compartiste unos pocos momentos con él, todavía no existe un código íntimo de los dos. “Aprender a comunicar lo que te pasa (las expectativas, las dudas, las ganas y los sentimientos) es una manera de disipar temores, conocer al otro y disponerte mejor al encuentro. Después, concentrate en el ‘aquí y ahora’ : eso te ayudará a relajarte y a gozar las sensaciones”, aconseja el psiquiatra y sexólogo Walter Ghedin, autor del libro Tipos en la cama, personalidad y sexualidad.

Tené en cuenta que probablemente tu hombre también esté nervioso. Ojo: “En los varones, la urgencia los predispone a no usar condones, penetrar sin juego previo y eyacular rápido”, advierte Ghedin. Por eso es tan importante que hablen, tanto antes como durante, para guiarse mutuamente.

Según Laniado, una de las claves para disfrutar un primer encuentro sexual es no acelerar los tiempos. “Es  conveniente que antes de ese momento tengas encuentros con él en los que solo haya mimos y caricias. De esa manera vas a darte cuenta si hay piel entre los dos, y si la atracción sexual se incrementa cada vez más”, asegura la sexóloga.

Vos querés que tu primera vez con él sea lo más placentera posible, lo que está muy bien. Para eso, tenés que sacarte de encima el fantasma de un embarazo no deseado o de una enfermedad de transmisión sexual. Entonces, deben conversar y pactar el modo en que van a cuidarse. “Sin prevención no se puede disfrutar”, advierte Laniado. Asumí una actitud responsable sobre tu cuerpo. Si él no lo entiende del mismo modo, vas a descubrir a tiempo que no estás frente al mejor compañero.

Just do it

Olvidate de los prejuicios, de lo que suponés que a él puede llegar a gustarle y de lo que hacías con tu ex. Cuando llegue el momento, vas a estar delante de una nueva persona, lo que significa un cuerpo, una fogosidad, fantasías y una química que aún no conocés. Y eso ya es excitante en sí mismo. Gómez Di Leva resume la cuestión en un verbo: explorar. “En el sexo no debemos ser piratas en búsqueda de un tesoro, sino exploradores asombrados y admirados frente a los tesoros que descubrimos. Tené en claro que el objetivo de esa primera vez es conocerse. Tu actitud tiene que ser la de aventurarte sin esperar encontrar nada”, recomienda el especialista. Para disfrutrar, vas a tener que dejar de lado las expectativas y las exigencias. Difícil, pero posible.

No intentes programar de antemano el encuentro: “Primero voy a hacer esto, después aquello otro…”. “Tampoco te aferres a la creencia de que un orgasmo es la condición para pasarla bien. En vez de eso, disfrutá el camino, entregate a la novedad de las caricias, los aromas y el cuerpo del otro. Es excitante no saber cómo él va a reaccionar, y buscar juntos las posiciones que a los dos les resulten placenteras. No tengas en cuenta los estereotipos: para el sexo, la única ‘regla’ es la libertad, el respeto hacia vos misma y hacia el otro, darte permiso para el placer y experimentar”, asegura la ginecóloga y sexóloga Florencia Salort, del Hospital Italiano de Buenos Aires.

“¿Cómo me pongo?”

Los expertos aconsejan que no intentes poses rebuscadas la primera vez que tenés sexo con él: las más convenientes son las clásicas (hombre arriba o mujer arriba). “El misionero es una buena posición para arrancar porque es cómoda y no implica una dificultad especial para la penetración. Este encuentro no es el más indicado para hacer una exhibición del Kamasutra ilustrado”, afirma Gómez Di Leva. Ya habrá tiempo para innovar.

No estés demasiado pendiente de las reacciones de tu hombre. Está bárbaro que registres lo que él hace, siente o dice, pero no te olvides de que primero debés estar conectada con tus propias sensaciones. “El encuentro sexual tiene dos direcciones: hacia uno mismo y hacia el otro. Ambas tienen que estar presentes”, explica Ghedin. “Lo mejor es soltar el control y fluir en la relación. Una buena estrategia es ducharse juntos antes, así los dos van a estar relajados y más predispuestos al goce”, aconseja Laniado.

Una recomendación clave: “Todo el cuerpo está preparado para disparar sensaciones de placer, por lo tanto no tenés que centrarte solo en la genitalidad. Tocar, sentir, guiar al otro con las manos, decir lo que te encanta y hacer lo que al otro le gusta son acciones indispensables del buen sexo. Cuando el cuerpo erotizado está activo, la mente no genera pensamientos negativos”, afirma Ghedin.

100% genuina

No se trata de enamorarlo perdidamente esa primera vez ni que todo salga “de película”. Esas expectativas  (en realidad, son presiones) te llevan a adoptar un personaje. “Lo mejor que te puede pasar es gustarle al otro tal cual sos: incluso, hasta un poco insegura (en realidad, dejar ver tu vulnerabilidad es señal de autoconfianza). Es preferible que él no se enganche con vos a que se enamore de lo que no sos”, asegura Gómez Di Leva.

Olvidate de las especulaciones acerca de cómo será todo y qué pasará entre ustedes después de ese encuentro. Eso lo van a ir descubriendo paso a paso. “La mejor noche de sexo viene con el tiempo”, asegura  Salort. Por lo pronto, empezá a disfrutar de la gran aventura de enredarte con un cuerpo que todavía no exploraste (del todo). 

Los diez mandamientos para un primer encuentro  genial

1. Dejate llevar por el deseo. El temor no debe frenar tu placer.

2. Concentrate en los aspectos atractivos del otro y pensá qué harías con ellos: “Me gustan esos labios y los lamería despacito”. Eso estimula tu libido y anula los pensamientos anticlímax.

3. No existen guías o modelos de relación sexual. Vos y él van a encontrar su propio “estilo”.

4. Olvidate de los prejuicios o supuestos del estilo: “Si hago eso, va a pensar que soy una zarpada”, “A los hombres no les gusta que la mujer asuma el control”, “No se le para, entonces no le gusto”.

5. El sexo es una experiencia dinámica: dejate sorprender.

6. No pienses en historias fallidas pasadas. La clave: “acá y ahora”.

7. Concentrate en tu cuerpo y en lo que sentís sin juzgar ni criticar (ni a vos ni a él).

8. Usá el gran poder de la fantasía.

9. Disfrutá de los juegos eróticos. Eso reduce la ansiedad y la urgencia por llegar rápido al orgasmo.

10. Acordate de que la penetración es una etapa más del encuentro y no el objetivo final.