El mejor amigo de la mujer

A los varones les encanta el “perrito”, pero tal vez vos no seas muy fan de esa pose: debido al ángulo de penetración, el pene suele impactar directo en el cuello del útero, y eso tal vez no te resulte tan agradable. La especialista en sexualidad Mariela Telser (www.isabellina.com.ar) asegura que, en el perrito, algunas mujeres pueden llegar a sentir dolor porque no están suficientemente lubricadas, por el tamaño del miembro o porque les incomoda soportar el peso del propio cuerpo. “Para relajarte necesitás una muy buena previa. Hay dos estrategias infalibles: sentir un gran deseo y que la zona esté bien lubricada”, explica Telser.

Un truco para gozar más. “Colocá dos almohadones debajo de tu abdomen y deslizate hacia adelante: vas a quedar de rodillas, con el pecho apoyado sobre la cama. Eso evitará que sientas dolor”, aconseja la especialista en juegos eróticos Paola Kullock, directora de la Escuela de Sexo (www.pkescueladesexo.com.ar).

El perrito puede ser el pasaporte a un Mega O. “Permite la estimulación del área de la vagina llamada fórnix anterior (ubicada entre la pared vaginal y el útero), lo que genera una sensación muy intensa”, afirma la sexóloga Emily Nagoski, autora de Come As You Are. Además hay otra gran ventaja: “Esa pose facilita la autoestimulación y permite que tu hombre te acaricie y bese mientras vos te tocás”, asegura Telser. Ese combo hot puede explicar por qué es la posición favorita de la mayoría de las mujeres. Ponela en práctica y ¡aullá de placer!

Truco secreto

Arqueá tu espalda mientras él te sujeta y te penetra: así te asegurás de que el movimiento estimule la pared frontal de tu vagina.

Pasaje a las estrellas

A los perros les encanta el sofá: ¿por qué no imitarlos? Echá a tu mascota del sillón, recostate sobre un brazo y pedile a él que avance desde atrás.

Rápido y furioso

Arrodillate y descendé el torso. Mantené las piernas juntas mientras él te sujeta de la cintura. Al presionar tus muslos, hacés que trabajen los músculos pélvicos que producen el orgasmo, y  así alcanzás más rápido el éxtasis.

Tiro al blanco

Apoyate sobre los antebrazos y llevá la pelvis bien arriba. Ese ángulo facilitará el acceso a tu Punto G. Y vos podés estimular tu clítoris.