1. La comunicación.
Ya sabemos que es la base de cualquier relación, pero cuando las dos personas son de países diferentes, conversar es mucho más importante. Que no te dé pena explicarle a tu amor las cosas que te enojan o no te hacen sentir bien, o incluso que no entiendes, es muy normal. También hazlo sentir cómodo para que él tenga la confianza de platicar contigo sin miedo.

2. Aprender su idioma.
Es básico aprender su lengua, porque si quieres comunicarte con tu galán, o hablan el mismo idioma o resultará muy complicado. También debes esforzarte por enseñarle a hablar el tuyo, ya que él también formará parte de tu día a día, de tu familia y tus amistades. Esfuérzate al máximo por aprender la lengua y si crees que es muy difícil o no te sientes preparada, tranquila, anímalo a que haga él lo propio para que te vayas sintiendo más segura.

3. Conocer su cultura.
No sólo el idioma es importante, cada país tiene costumbres que te serán absolutamente desconocidas, pero que para él pueden ser de lo más comunes. Los inicios en el amor siempre son difíciles, lo sabemos, pero cuando distintas culturas conviven bajo el mismo techo la guerra está servida.

4. El cortejo.
Su manera de cortejar no es igual a la que estás acostumbrada; no desesperes ni seas demasiado exigente —al principio—. Dale chance de que aprenda cómo se hacen las cosas en tu corazón o date la oportunidad de entender que todos los esfuerzos que hace para consentirte son una gran muestra de cariño.

5. Enseñarle tu mundo.
Tú y él forman parte de mundos diferentes que es necesario que conozcan. Compártelo, sin miedo, con lo bueno y lo malo. En una pareja no hay secretos. Consigue que se sienta cómodo en tu mundo, que sea parte de él, que tus amistades también comprendan y respeten que quien llega de otro país es tu pareja y todos los esfuerzos son válidos para que se sienta increíble a tu lado.

6. Gastronomía.
¿Quién no ha escuchado alguna vez que hay hombres a los que se les conquista por el estómago? Es un arma de seducción. No te preocupes si no eres una gran chef, siempre podrás sorprenderlo con diferentes rutas gastronómicas que, además, mostrarán los secretos más bellos de tu ciudad.

7. Sin prejuicios.
Cuando decides compartir tu vida con alguien de otro país y cultura, es necesario tener la mente abierta. ¡Y ojo!, también que tu compañero de viaje amoroso lo sea. Es seguro que vas a encontrarte con ciertas situaciones durante la relación que pondrán a prueba no sólo el amor, sino a la pareja. Si tu novio se atreve con un taco de chapulines, ¿por qué tú no vas a hacer lo mismo con un pastel de riñones británico?