El cantante inglés (62) declaró en un diario que tomó la decisión de no entregarle a ninguno de sus hijos los 306 millones de dólares que ganó durante toda su carrera. “Mis hijos no deben tener seguridad financiera. La gente queda arruinada por no tener que ganar su propio dinero”, aseguró Sting.
El músico, padre de seis hijos, explicó: “Ellos tienen que trabajar. Mis hijos lo saben y rara vez me piden algo, lo cual respeto y aprecio. Obviamente, si tuvieran un problema yo los ayudaría, pero nunca tuve que hacerlo. Tienen la ética laboral que los impulsa a ser exitosos por sus propios méritos”.
Y parece que la enseñanza de vida del ex líder de The Police tiene sus frutos, ya que sus hijos mayores lograron hacerse un nombre en los distintos rubros que eligieron: Mickey Sumner es actriz, Jake es modelo, Coco y Fuschia Sumner son parte de una banda de música y Joe es líder del grupo Ficcion Plane. Giácomo, aún adolescente, todavía no decidió a qué se dedicará.



















Comentarios