No soy una coach motivacional, así que no voy a decirte que podés hacer todo lo que quieras. La verdad es que el tiempo es finito, nuestras capacidades físicas y mentales son limitadas (no podemos volar, por ejemplo, ni retener el saber universal en nuestras cabezas) y nuestros recursos materiales son módicos. Es decir, tenemos la excusa para no hacer cosas imposibles. Incluso, son buenas excusas para no hacer otras cosas que serían perfectamente posibles si contáramos con algo aún más escaso que el tiempo, los recursos o las capacidades personales, y que es la voluntad. Aparentemente, Ana Argento Nasser no tiene ese problema. Ella es una periodista cordobesa que, a los 21 años y siendo una simple pasante en un museo, conoció las dificultades que tienen los discapacitados para disfrutar de las cosas que para ella eran naturales, y se propuso hacer lo que estuviera a su alcance para mejorarles la vida. Creó el programa “Cultura para Todos: Proyecto de Inclusión Social” y desde ahí no paró. Hoy, con 27 años, Ana tiene un blog, una website, una fundación y un programa de radio, y trabaja en un taller de teatro, todas actividades relacionadas con la integración de personas con discapacidad. Hace un año, Naciones Unidas distinguió su programa de cultura por la inclusión como Best Practice. Y todo eso Ana lo hizo a fuerza de voluntad, paciencia y un nivel asombroso de cabezadurismo para insistir cada vez que se le interponía una barrera. Arrancó desde la posición de que podía hacerlo, aunque no le sobraran ni el tiempo ni los recursos. Y pudo. Por eso, además de presentártela como Caso Real, quise dedicarle este espacio. Vale la pena conocer a Ana, ¿no te parece?

Detrás de escena
✤ No te puedo explicar el revuelo que armó Joe Fernández en la redacción de Cosmo. Cuando les propuse a Flor, Eri y Leila que “juzgaran” a Joe Fernández por su libro polémico †Cómo conseguir chicas†, ni sospechaba que las tres redactoras se iban a tomar tan a pecho la consigna. Lo juzgaron, ¡y le dieron un correctivo! Al despedirse, Joe me dijo: “Me voy con la marca de un taco clavado en la espalda”. Enterate por qué, en la nota.

✤ Gimena Accardi tiene un lomazo. Yo no lo sabía y me sorprendí el día de la producción de tapa, cuando Lu Di Nucci le hizo ponerse un traje de baño. Parada en el borde de la pileta del hotel Dazzler Recoleta, no había nadie que no quisiera mirarla. Hubo uno que se pasó de curioso: un turista asiático que para poder contemplarla de arriba abajo, invadió las fotos.

 Hasta la próxima Cosmo.