Para lograrlo, poné en práctica estos tips:

➺ Que cada día te sorprenda algo: animate a probar una nueva actividad o cumplí las tareas de siempre, pero de forma distinta. Observá los detalles, esos que en general no ves. Hacete preguntas sobre cuestiones que das por hecho y ensayá respuestas posibles, sin pensar si son lógicas.

➺ Rompé la rutina: modificá ciertos hábitos cotidianos y experimentá: desde lavarte los dientes con otra pasta dentífrica o cepillártelos en la ducha, hasta tomarte el colectivo rumbo al trabajo en una parada distinta, usar otra línea o bajarte antes. El objetivo es que entrenes a tu cerebro para que entienda que hay múltiples formas de hacer las cosas y de encontrar soluciones a posibles problemas.

➺ Escribí diariamente qué te llama la atención: después de unas semanas, releé las anotaciones. Vas a encontrar cuestiones que te interesan y que no habías notado.

➺ Explorá lo que te despierte interés: date el tiempo para investigar un tema, una canción, una disciplina o lo que te resulte atractivo. Hacelo desde la sorpresa y descubrimiento, nunca pienses que sabés todo.