Desde que aterrizó en Miami, hace 18 años, la estrella colombiana de la serie estadounidense Modern Family se convirtió en el símbolo sexual más codiciado de América. (Sin ir más lejos, cuando les comenté a mis amigos varones que iba a entrevistarla, la mayoría se ofreció para ser mi asistente). En el hotel, reina la calidez de una mujer directa y divertida… que es la actriz con mayores ingresos de la tevé. El año pasado, invirtió 19 millones de dólares en Kmart, la línea de ropa, joyas y artículos para el hogar que lanzó en 2011. Actualmente, además de sumarse a la película Machete Kills, de Robert Rodríguez, hará una remake del film Fuego contra fuego. Aquí, lla habla (muy abiertamente) sobre sexo, dinero, amor, congelación de sus óvulos y, por supuesto, de sus lolas.

Cosmo: ¡Tu anillo de compromiso es enorme! ¿Te involucraste en la elección del tamaño?
Sofía: No. Nick lo eligió por su cuenta. Él sabe que no me gustan las joyas pequeñas. Como buena latina, me fascina todo lo que es grande (Risas). En realidad, luce gigante en mí, pero me encanta. Le dije: “Nick, no voy a cambiarlo porque cuando salgo puedo ponérmelo aquí (en el dedo medio)”. Él me respondió: “Un poco más de respeto hacia mí. ¿Cómo vas a decirme eso en la cara?”.

C : Se dijo que vos y Nick estaban a punto de convertirse en padres a través del alquiler de un vientre. ¿Cómo fue que se originó ese rumor?
S: Como congelé mis óvulos, tuve que ir al consultorio de mi médico cien millones de veces para que me diera inyecciones. Muy probablemente el rumor haya venido de ahí. Cuando mi doctor me dijo: “Hay una pequeña posibilidad”, no pude evitar contestarle: “Eso es muy duro”. Como yo ya tengo un hijo, nunca pensé que tendría que hacer eso. Pero voy a tener que recurrir a un vientre sustituto, porque tuve cáncer de tiroides y me expuse a la radiación. Tampoco quiero esperar toda la vida para volver a ser madre, pero todavía no es el momento: estoy trabajando como un animal.

C : ¿Quiénes son tus mejores amigas?
S: Todas están en Colombia. Fuimos juntas a la universidad, pero la mayoría de ellas son, como se dice, amas de llave. Quiero decir, ¡amas de casa! (Risas). Oh, van a matarme. Ya me las imagino diciendo: “Andá a la mierda, Sofía. Claro ¿no? Como sos la única estrella de cine del grupo, creés que podés ningunear nuestro trabajo”.

C : La gente asocia la cultura colombiana a las mujeres hot y al sexo. ¿Por qué?
S: Yo crecí en una cultura en la que te ponés una tanga sin siquiera pensarlo. Usás una minifalda y un top, no una cosa o la otra. Pero a los hombres de Sudamérica no les gusta que las mujeres sean tan abiertas en lo que respecta al sexo. Podés hablar con tu pareja, pero no sentarte a charlar con tus amigas sobre cómo practicar sexo oral. Hay un dicho… Ay, ¡perdí mi español! Oh, sí. “Hay que ser una dama en la calle y una perra en la cama”.

C : Admitiste que sos muy exigente con tu cabello y tu maquillaje. En la cama, ¿también sos exigente?
S: No se puede tener relaciones sexuales todos los días, cualquiera que te diga algo así te estaría mintiendo. Pero sí uso camisones y batas de seda japonesa. Durante mucho tiempo, viví sola con mi hijo y veía a mis novios en un hotel. Así que en casa dormía con camisetas viejas. Cuando me fui a vivir con Nick, me di cuenta de que no podía seguir haciendo eso. Ahora, solo conservo pijamas en buen estado porque todo lo que esté en mis cajones voy a usarlo en algún momento.

C : ¿Cuándo te sentís más sexy?
S: Cuando estoy de vacaciones en la playa. Comencé usando trajes de baño de una sola pieza hasta que una de mis primas colombianas me dijo: “¿Por qué no usás un bikini?”. Yo le contesté: “Vamos a ver quién sale mejor en las fotos”. Por supuesto que yo, porque mi silueta lucía perfecta con una malla entera. Después de eso me llamaban a cada rato desde Colombia y me decían: “¿Dónde compraste esos trajes de baño de una sola pieza? No podemos conseguirlos en ningún lado”.

C : ¿El amor influye en tu apariencia?
S: ¡Totalmente! Cuando te enamorás, estás mucho más motivada. Comenzás a preocuparte y a cuidarte más. Después te sentís demasiado cómoda y te dejás estar (Risas).

C : ¿Cómo repercute el sexo en el look de una mujer?
S: El sexo es parte de una vida feliz y completa. Podés tener una gran relación en la que tanto vos como tu pareja se respetan mutuamente, pero si no estás satisfecha con tu vida sexual, jamás vas a ser feliz. Cuando conozco a un hombre, sé perfectamente (y gracias a Dios) si voy a gustarle, si voy a tener ganas de dormir con él o de tener una relación. A veces (las mujeres) se desesperan y aceptan lo que sea. No estoy juzgando, ¿por qué no?

C : ¿Cómo evolucionó tu estilo?
S: Aprendí que no todo lo que me pongo me queda bien, y eso se debe al tamaño de mis lolas. Cuando las revistas dicen: “Sofía luce el mismo modelo de la otra vez”, yo pienso: “Sí, ¿y qué?”. Mis pechos son reales. Son un 32F. Es imposible que me ponga un vestido con espalda descubierta, porque de esa manera no podría sostener mi delantera. En ese caso las revistas dirían: “¿No se dio cuenta de que ese vestido le hace los pechos caídos?”.

C : ¿Qué planes tenés para dentro de cinco años?
S: Nunca tuve un plan para todo. Sé que no voy a conseguir nada igual a Modern Family. Sería ideal terminar con esa serie dentro de cinco años, para hacer películas y enfocarme en mi línea de ropa Kmart. Tal vez tener un hijo. Pero también quiero seguir trabajando el resto de mi vida. Me encanta hacer dinero. ¡Realmente lo disfruto!.